Los poppers se han convertido de un tiempo a acá en el tercer participante en muchos "revolcones gays". Su adicción es muy alta y su consumo se caracteriza por una importante dependencia tanto física como psicológica, que sus incondicionales relacionan con grandes hazañas sexuales y una desinhibición absoluta.
En algunos paises esta regulada su venta y en otros son ilegales. Su uso lúdico y sexual se inició en la década de los 70 en Nueva York, expandiéndose rápidamente en la escena gay y en los clubes nocturnos, usándolos en plena pista de baile. Su relación con el sexo viene dada por los efectos que provoca en el organismo. Aunque se cree que en menores de edad no es muy común, su consumo a últimas fechas se ha estado poniendo de moda y ya no es usada solo por gays, sino tambien por heterosexuales.
Definición: ¿Qué son los poppers?
Es un narcótico líquido que se inhala (compuesto por nitritos de alquilo o de isobutilo). Antes se vendían en pequeñas ampollas de vidrio, que al quebrarse (haciendo un el ruido onomatopéyico de POP, de donde viene la palabra poppers) liberaban sus vapores.
En la actualidad vienen en frasquitos o botellitas que se destapan. Su vaporización es tan rápida que los consumidores deben acercar sus narices al cuello del frasquito si no quieren perder su contenido, el cual en general es incoloro y de un olor fuerte.
Su principal mecanismo de acción es relajar los músculos lisos, incluyendo los de los vasos sanguíneos, ocasionando una baja de la presión arterial y aumento del ritmo cardíaco, resultando en una sensación de calor y euforia que es breve, ya que no llega a durar más de un par de minutos. El usuario siente un sofoco vertiginoso e inmediato, una gran sensación de calor interno y una sensualidad exacerbada. Al tratarse de un poderoso vasodilatador, realza el sentido del tacto.
Además, favorece la relajación muscular de algunos esfínteres como el ano, que se dilatan así con mayor facilidad. Esto explicaría su popularidad entre la poblacion gay, aunque la sensación producida no es del mismo nivel ni es placentera para todo el mundo.
A pesar de que se señala que el popper es menos perjudicial comparada con la mayoría de las demás drogas recreativas, está demostrado que puede causar serios efectos adversos, desde enrojecimiento de la cara y el cuello, dolor de cabeza, náuseas, vómitos, taquicardia e hipotensión, hasta cefaleas intensas o erupciones de color amarillo en las mucosas nasales o en las comisuras de la boca. También, aunque raras veces, se reportan vértigos, anemia… y disfunciones eréctiles.
Precauciones en relación con los poppers
Su efecto de droga recreativa sexual puede evitar que el consumidor deje de sentir irritaciones o desgarros durante el sexo, y por tanto, no sólo aumenta el riesgo de un posible traumatismo corporal, sino el de transmisión del VIH y de otras enfermedades venéreas, ya que su consumo produce que las mucosas corporales estén más expuestas a infecciones por sífilis, clamidias o VIH.
Ademas los poppers crean tolerancia, lo que unido a la breve duración de sus efectos, lo convierte en una droga adictiva peligrosa, con un elevado riesgo de intoxicación por sobredosis: existen estudios que afirman que ciertas células del cerebro pueden ser destruidas.
Recordemos que el popper es un ácido, si cae en la piel y mucosas (incluido el ano) causa más heridas. Cualquier derrame de poppers debe lavarse con agua abundante. No se recomienda inhalar la sustancia por la boca, y desde luego, jamás, beberla o inyectarla. Es un producto altamente inflamable y una la mínima chispa de cigarrillos, encendedores, etc, puede llegar a provocar un incendio rápidamente.
Se menciona que un sistema inmunitario ya debilitado puede sufrir daños suplementarios por consumo de poppers, quedando resentida nuestra protección natural o reforzada contra bacterias, virus y otros agentes patógenos. De momento, poco se sabe sobre las interacciones entre los poppers y los medicamentos antirretrovirales.
Contraindicaciones
Las personas con problemas del corazón, anemia, glaucoma (presión alta en el ojo) o alteraciones de la presión arterial NO deben ingerir este tipo de sustancias.
El consumo de poppers tiene su lado peligroso cuando se mezcla con otras drogas que también interfieren en el ritmo cardíaco como la cocaína o el éxtasis.
Está prohibida la inhalación de poppers a los que sufren de problemas cardíacos y especialmente a aquéllos que hayan tomado Viagra en las últimas 24 horas,pues esa combinación (conocida también como Chemsex), puede ser fatal.
Asi que ya saben, propaguen esta informacion entre aquellos que los consumen o los que tienen curiosidad. Como verán, inhalar poppers cada vez que uno se baja los pantalones no es necesariamente una buena idea ya que, como toda droga, su uso y abuso es riesgoso para nuestra salud.
FUENTE: Cityvega