10 consejos para el mejor sexo oral de tu vida
El sexo oral es uno de los momentos más morbosos del sexo gay. Es cuando entramos en contacto directo con las partes más íntimas de nuestro compañero, y es algo que sabemos valorar tanto como emisor como receptor. Por eso, no hay nada mejor que disfrutar de una buena felación en buena compañía, y si sigues los trucos y consejos que te traemos, probablemente el resultado sea aún más satisfactorio para las dos partes. Apunta, que vienen unos buenos consejos para la mejor mamada
1. No pienses en ello como en una obligación
Si lo ves como una verdadera obligación o un trabajo para tener que llegar a la parte que más te interesa que es la penetración, mal vamos. Piensa que es un momento de disfrute, en el que nadie ha de sufrir ni hay que hacer sacrificios. Otra cosa es que no te guste hacer felaciones, entonces lo hablas con tu pareja y lo acordais, pero si te animas a hacerlo, hazlo con todas.
2. Empieza por abajo y ve subiendo
Hay personas que piensan que es llegar y empezar a chupar. A veces te puede poder el morbo, pero lo más recomendable es crear un poco de situación, empezando por la base, muy poco a poco, con besos o incluso con algún lametón, y currarte el camino a lo más alto. Seguro que el receptor de la felación lo agradecerá mucho y cuando llegues, el placer será máximo.
3. Que el receptor de la felación se estire
En las pelis porno gay, el tío que recibe la mamada siempre está de pie. Esto queda de lujo para la cámara, pero si quieres que disfrute de verdad, dile que se tumbe, se relaje y que tú hagas el verdadero trabajo, ya que es tu momento.
4. No tengamos prisa
La prisa nunca es buena consejera, por eso es importante no correr demasiado, disfrutar al máximo del momento y no contar la hora. Nadie te va a dar un premio por terminar antes, y a no ser que haya hecho una apuesta con tu compañero de cama, no hace faltar ver quién tarda menos en acabar al otro. Disfruta sin prisas.
5. Prueba con lubricante
Puede parecer que con la saliva basta, pero un poco de ayuda nunca está de más. Arriésgate y prueba algo nuevo, como lubricante con base acuosa a la hora de hacer una felación. Te sorprenderá muy positivamente el resultado y nadie tendrá que quedarse ya nunca más con la boca seca.
6. De vez en cuando, para
Una de las cosas más placenteras de hacer o recibir una felación es cuando se detiene por un rato, dejando descansar y preparando el siguiente turno. Puedes parar y masturbar un poco a tu compañero, jugar un poco, besarlo… Así crearás más ambiente para cuando vuelvas ahí abajo y el morbo ya será máximo.
7. No te olvides de los testículos
Mucha gente se olvida de jugar con el escroto y los testículos, son zonas muy sensibles que, tratadas correctamente, pueden hacer que la felación sea aún más morbosa y excitante. Acaríciarlos, cógelos con suavidad pero con firmeza, y pásatelo bien con ellos, aprovechando que los tienes tan cerca. Además, no te olvides del perineo, esa zona entre los testículos y el ano que es un punto de placer máximo para muchos hombres.
8. Si te gusta, habla mientras lo haces
Esto va a elección del consumidor, pero si te va el morbo, habla mucho mientras haces la mamada. Puedes contarle a tu compañero lo bien que te lo estás pasando, lo mucho que te gusta su pene, decirle lo grande que es. Ah, y uno de los mayores morbos para mucha gente es que se lo digan con la boca llena. Esto ya va a gusto de cada uno, así que tú mismo elige el morbo que más te vaya, pero hablar es una buena forma de comunicarse y ampliar el morbo. Así también te da un poco de descanso y puedes relajarte y prepararte para el siguiente asalto.
9. Recuerda respirar por la nariz
Puede parecer algo muy obvio, pero es muy importante recordar respirar por la nariz. Puede que seas de los que se pasa mucho rato practicando felaciones (como te hemos dicho, no hay prisa, no tienes que poner la alarma), por lo que es importante que no pierdas el sentido de la respiración. Así que como si se tratara de un ejercicio, prueba a respirar solo por la nariz, que no la tengas taponada, y siempre con seguridad. Ojo, que si también eres de los que se quieren “atragantar” hazlo con mucho, mucho cuidado, no te vuelvas loco y no termines vomitando o desmayado por llevarte al límite. Que aquí estamos para disfrutar y pasarlo bien, no para lo contrario.
10. Decídete: tragar o facial
Y llega el final. El gran momento. Si con la mamada termina, es decir, tu compañero eyacula, siempre está el dilema. Elegir cómo y dónde. Hay quién recomienda que lo decidas antes, hay quién dice que vayas con el ritmo de la sesión, lo que está claro es que lo tienes que hacer con total seguridad. Recuerda que si decides tragar, el contagio de ETS sigue ahí, y si no conoces muy bien a tu compañero, puede ser un problema. Con un facial no hay problema, cierra la boca y los ojos.y a disfrutar. Tú eliges, siempre con cabeza, por favor.