Miles de personas acudieron hoy al desfile del orgullo de Lesbianas, Gais, Bisexuales y Transexuales (LGBT) de Río de Janeiro, en el que los organizadores enviaron un mensaje político en plena campaña electoral.

Bajo el lema “Vota en las ideas, no en las personas”, el desfile de este año pidió el voto consciente de los manifestantes, que el próximo 7 de octubre tendrán una cita en las urnas con motivo de las elecciones presidenciales, legislativas y regionales.

Con ropa veraniega para hacer frente a las altas temperaturas y coloridos disfraces, miles de brasileños realizaron el tradicional recorrido a lo largo de los cuatro kilómetros de longitud de Avenida Atlántica, que bordea la playa de Copacabana.

La vigésimo tercera edición del desfile del Orgullo se realizó a tan solo una semana de los comicios, por lo que hubo un componente político y algunos mensajes contra el aspirante presidencial ultraderechista Jair Bolsonaro, polémico por sus declaraciones homófobas.

“El movimiento crece cada año y este año tiene un gas (motivo), estamos enfrentando un fascismo. El fascismo se organizó en forma de candidatura, que tiene un 27 % de intención de voto y acabó dando una inyección de ánimo a la comunidad LGBT, que es una de las principales víctimas de ese fascismo”, afirmó a Efe Jean Wyllys, diputado federal del Partido Socialismo y Libertad (PSOL).

Wyllys denunció el carácter “conservador” del Congreso brasileño, que, a su juicio, ha impedido atender demandas importantes para la comunidad.

A través de carteles, los participantes exigieron respeto a la diversidad, en medio de un aumento de la representación LGBT en las elecciones de este año, que creció un 384,6 % respecto a los comicios anteriores, según la asociación ABGLT.

“Estamos luchando contra el fundamentalismo religioso y contra todos las personas fascistas que están apareciendo en Brasil. Brasil jamás podrá ser fascista”, dijo a Efe Eula Rocha, uno de los participantes de la marcha.

A pesar del ambiente lúdico y del refuerzo policial, el desfile estuvo marcados por varios robos a plena luz del día y en uno de los puntos más turísticos de la ciudad, según pudo comprobar Efe