"Algo que solo Apple podría hacer". Esas fueron las palabras que dijo Tim Cook antes de abrir la caja que contenía el iPhone 12 mini, el iPhone más pequeño de los cuatro que componen el catálogo actual de la compañía. Es, literalmente, un dispositivo que no tiene competencia. No existe ni un solo gama alta, porque el iPhone 12 mini es un gama alta en mayúsculas, que ofrezca lo que ofrece el iPhone 12 mini: un rendimiento sobresaliente en un tamaño reducido.
El movimiento de Apple fue de lo más curioso, ya que los tres iPhone restantes aumentaron ligeramente su tamaño. Además, el lanzamiento de este producto llega justo cuando los smartphones están empezando a tener diagonales que comienzan a acercarse a las siete pulgadas (con relaciones de aspecto más alargadas, claro). En pleno apogeo de los móviles grandes, Apple se lanza a la piscina de los móviles pequeños. ¿Qué tal es la experiencia con este iPhone 12 mini? Vamos a verlo.
IPHONE 12 MINI | |
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DIMENSIONES Y PESO | 131,5 x 64,2 x 7,4 mm |
PANTALLA | Super Retina XDR |
PROCESADOR | Apple A14 Bionic |
MEMORIA RAM | 4 GB |
ALMACENAMIENTO INTERNO | 64 GB |
CÁMARA TRASERA | Principal: 12MP, f/1.6, OIS, QuadLED flash |
CÁMARA DELANTERA | 12MP, f/2.2 |
BATERÍA | 2.227 mAh |
SISTEMA OPERATIVO | iOS 14.2 |
CONECTIVIDAD | 5G sub-6 GHz |
OTROS | Resistencia IP68 |
PRECIO | Desde 809 euros |
Comenzamos hablando del que, sin lugar a dudas, es el principal atractivo del iPhone 12 mini: su diseño y su tamaño. A efectos prácticos, y esto es algo que conviene tener presente a la hora de tantear el dispositivo para su posible compra, estamos ante un iPhone 12 en miniatura. Todo lo referente a materiales, acabados, sensaciones en mano (quitando el tamaño) y construcción se podría copiar y pegar perfectamente del análisis del iPhone 12 porque, como digo, es exactamente lo mismo, pero más compacto.
Así pues, tenemos una trasera acabada en cristal de color verde en nuestro caso, aunque está disponible un amplio abanico de colores. A diferencia de lo que sucede con los Pro, el iPhone 12 mini sí que se llena de huellas. Es uno de los problemas inherentes al cristal y aunque el color verde disimula ligeramente la suciedad, las huellas siguen estando ahí. Sea como fuere, la sensación en mano es sobresaliente. Si de algo sabe Apple es de diseñar smartphones y el iPhone 12 mini, a pesar de su tamaño, se siente extremadamente premium. Además, apenas resbala.
En la parte trasera tenemos el módulo con la doble cámara, el flash LED y un micrófono. El módulo es similar al que vimos en el iPhone 11 y de ahí en adelante. Que guste más o menos depende de cada usuario, a mí al menos no me disgusta lo más mínimo. Está bien integrado con el chasis del terminal y tiene un acabado más pulido y de color mate. No sobresale tanto como el del iPhone 11 Pro, pero lo hace, lo que significa que el terminal se tambalea si lo dejamos con la pantalla hacia arriba sobre una mesa. Esto y el problema de las huellas se soluciona con algo tan sencillo como una funda.
En el canto derecho tenemos el botón de inicio, que es de un tamaño considerable y hace que sea fácil acceder a él con una sola mano. En el canto izquierdo tenemos los botones de volumen, el control de modo de sonido y el slot para la tarjeta SIM. En la parte inferior el puerto Lightning (nada de USB tipo C, por ahora) y el altavoz estéreo y en la parte superior nada de nada. No hay jack de auriculares, aunque como podemos ver en el despiece de iFixit, tampoco es que haya espacio para él.
El iPhone 12 mini, como sus hermanos, bebe del iPhone 5 para su estética. Después de varias generaciones de iPhone con bordes redondeados, los iPhone 12 vuelven a apostar por los bordes cuadrados. Esto es bueno, porque lucen realmente bien, pero también supone un sacrificio en términos de comodidad. Los iPhone 11 se integran muy bien en la mano, ya que los bordes redondeados hacen que sea más fácil sujetarlos. Los bordes cuadrados, sin embargo, se clavan algo más. Esto quizá sea más evidente en los modelos más grandes, pero el iPhone 12 mini lo compensa con un tamaño más reducido.
Pero más allá de hablar de materiales y construcción, creo que lo realmente interesante es hablar de la experiencia con un móvil pequeño. Y aquí conviene hacer el primer matiz: el iPhone 12 mini no es tan pequeño como podría parecer. Mi móvil personal es un iPhone 11 Pro y no he notado un cambio demasiado drástico en la experiencia diaria. Es más pequeño, no hay duda, pero realmente la sensación es, de alguna forma, relativamente familiar.
No obstante, debo reconocer que la sensación con el iPhone 12 mini es más parecida a la que tuve con el iPhone SE (2020). Es muy cómodo tener, manejar y usar un móvil compacto. Si ponemos el iPhone 12 mini al lado de un iPhone SE (2020) veremos que el iPhone 12 mini es casi como el segundo, pero todo pantalla y con notch. ¿Qué significa eso? Que es muy, muy, muy fácil de usar con una sola mano.
El teléfono es excepcional. Cabe perfectamente en la mano, se agarra sin mayor problema y durante el tiempo que lo he estado usando no he tenido problemas de ningún tipo. Es más, ni siquiera he echado en falta una pantalla más grande. Aunque sigo pensando que el iPhone 11 Pro tiene el tamaño perfecto, el iPhone 12 mini puede ser, y es, un candidato a tener muy en cuenta si queremos un móvil pequeño. No solo por su tamaño, sino por su peso.
Es, sin duda, uno de los grandes cambios con respecto al resto de modelos. El iPhone 11 Pro pesa 188 gramos, pero el iPhone 12 mini se queda en 133 gramos. Se nota mucho más ligero, aunque no por ello menos equilibrado. Es muy agradable de sujetar durante largas sesiones y en el bolsillo apenas se nota que lo llevamos, menos aún si usamos pantalones anchos. También ayuda que sea menos grueso.
En definitiva, tenemos un smartphone compacto, ligero, bien construido, que se siente premium y que es agradable de usar. Es un terminal de la gama más alta en formato reducido y, como veremos a lo largo del análisis, no tiene nada que envidiarle al resto de sus hermanos. Es un iPhone 12 miniaturizado. Si del iPhone 12 nos gustó cómo transmitía ligereza, en el iPhone 12 mini nos ha gustado todavía más.
Como decíamos, el iPhone 12 mini es un iPhone 12 en miniatura. Eso aplica también a la pantalla, ya que tenemos exactamente el mismo panel que el iPhone 12, pero más pequeño. En este apartado conviene destacar que Apple se ha desecho completamente de los paneles IPS/LCD y que todos los iPhone 12, el mini incluido, montan paneles OLED.
En este caso encontramos una pantalla de 5,4 pulgadas con resolución FullHD+ (2.340 x 1.080 píxeles), lo que se traduce en más de 400 píxeles por pulgada. El brillo máximo en condiciones normales es de 625 nits, pero asciende a más de mil con el HDR. En pocas palabras, la pantalla se ve perfectamente a plena luz del día, en interiores y exteriores, y de noche. Las pantallas OLED de los iPhone siempre han destacado por ofrecer un buen rendimiento y la del iPhone 12 mini no es una excepción.
El notch sigue haciendo acto de presencia y quizá sea más llamativo en este móvil que en sus hermanos. ¿Por qué? Porque a pesar de que la pantalla es más pequeña el notch sigue siendo del mismo tamaño, lo que hace que llame todavía más la atención. ¿Es estético? No, hay soluciones más disimuladas como los móviles Android han demostrado. ¿Es simétrico? No, en absoluto. ¿Molesta? Ni lo más mínimo. Puede chocar al principio, pero con el paso del tiempo te acabas haciendo a él. Eso no quita que ya empiece a lucir un poco "anticuado", dicho sea de paso.
La pantalla, como decimos, se ve perfectamente y conviene que su tamaño no nos engañe. 5,4 pulgadas son 5,4 pulgadas, vamos, que no son pocas. ¿A dónde quiero llegar? A que si bien es cierto que un móvil de 6,5 pulgadas nos da una experiencia mucho mejor al una película o un vídeo de YouTube, el iPhone 12 mini tampoco se queda corto. Esto se aplica de la misma forma a los juegos, por cierto.
No se ve igual y no es tan inmersivo, pero es posible y está, sencillamente, bien. Igualmente, no es un móvil que esté pensado para ver películas, sino para ofrecer un rendimiento sobresaliente en un tamaño compacto a aquellos usuarios que estén dentro del ecosistema Apple (o quieran entrar) y prefieran no llevar un ladrillo en el bolsillo. Pero que si quieres ver el último episodio de 'The Mandalorian' en el iPhone 12 mini puedes hacerlo sin achinar los ojos. Yo lo he hecho.
Lo que sí se podría esgrimir es que Apple se ha quedado atrás en cuanto a tasa de refresco. Llevamos tiempo viendo los 90 Hz, 120 Hz y hasta 144 Hz en los smartphones Android de gama media y alta y ya va tocando que Apple se sume a esta tendencia. Es de esas cosas que no se valoran hasta que las tienes y te las quitan. No hemos echado en falta más fluidez al interactuar con el iPhone 12 mini, pero basta con usar otro móvil con 90 o 120 Hz para darse cuenta de que la experiencia es mucho mejor. Quizá el año que viene sea el momento, pero por ahora toca conformarse con los 60 Hz.
Otro asunto es el lector de huellas. Aunque las primeras generaciones de lectores de huellas bajo la pantalla tenían margen de mejora, la tecnología ha mejorado mucho y ahora funciona realmente bien. Entiendo la filosofía de Apple de no lanzar algo hasta que esté pulido y funcione perfectamente (ejem, 5G, ejem), pero habría agradecido tener un lector de huellas bajo la pantalla o en el lateral.
No está de más rematar el apartado multimedia hablando del sonido. El iPhone 12 mini tiene un altavoz algo más pequeño que el del iPhone 12, pero se escucha bien. Es posible escuchar música, ver vídeos o una serie con el altavoz sin mayor problema siempre y cuando seamos conscientes de que al pasar del 70% de volumen ya comenzamos a notar cierta distorsión. Si nos mantenemos por debajo de este nivel conseguiremos una buena experiencia.
Quizá se nota menos contundencia que en los hermanos de mayor tamaño, pero es evidente que Apple ha tenido que hacer ciertos sacrificios en el tamaño de los componentes para lanzar este iPhone en miniatura. De acuerdo al despiece de iFixit, los miniaturizados han sido el Taptic Engine (el motor de vibración), el altavoz y, por supuesto, la batería. No quiero decir que el iPhone 12 mini se escuche mal, al contrario, se escucha bien, pero sin llegar al nivel del resto de iPhone 12.
Decir que el iPhone 12 mini no tiene jack de auriculares es como decir que el cielo es azul o que la nieve está fría. Apple hace años que se deshizo por completo de este componente y, en este caso, está más que justificado. Literalmente, no hay espacio para meter el jack de auriculares dentro del dispositivo. Si queremos usar auriculares la única opción será usar un adaptador USB tipo C - jack (que no viene en la caja) o apostar por unos auriculares inalámbricos.
A pesar de que el iPhone 12 mini es más pequeño, Apple no ha renunciado a montar el motor que llevan el resto de iPhone. Tenemos, por lo tanto, un procesador Apple A14 Bionic de cinco nanómetros acompañado por 4 GB de memoria RAM y... 64 GB de almacenamiento base. Los resultados de los benchmarks los puedes encontrar más abajo y, como salta a la vista, iPhone 12 mini arrasa en las pruebas sintéticas, pero vayamos por partes.
Sobre los 4 GB de memoria RAM, cabe destacar que, como los miliamperios hora de la batería, en Android van por un lado y en iOS por otro. Son sistemas operativos radicalmente opuestos y no necesitan la misma cantidad de recursos, por lo que con 4 GB de memoria RAM vamos más que servidos. No hemos echado en falta más potencia ni para jugar, ni para navegar, ni para nada de nada. 4 GB de RAM están bien y el Apple A14 Bionic es una garantía de futuro no solo para este año, sino para los venideros.
Los 64 GB de almacenamiento base, sin embargo, ya son criticables. Hablo a título personal: yo soy un usuario que tiene todo en la nube y apenas guarda archivos en local, por lo que no tengo problemas con 64 GB, pero entiendo que haya usuarios que reciban/manden muchos archivos por WhatsApp, que gusten de descargar listas de reproducción de Spotify y que sigan almacenando cosas en la memoria del teléfono. En ese caso, 64 GB se pueden llegar a quedar cortos y, por lo tanto, conviene apostar por una versión con más almacenamiento (128 o 256 GB).
Desde mi punto de vista, Apple debería olvidarse de una vez por todas de los 64 GB de almacenamiento base y empezar a ofrecer 128 GB. Sea como fuere, si el iPhone 12 mini te interesa y te preocupa el espacio disponible, por 50 euros puedes conseguir el modelo de 128 GB, que ya es otra cosa y da cierta tranquilidad de cara al futuro. Queda en manos de cada usuario tomar una u otra decisión.
En cuanto a la experiencia en juegos, es la que se podría esperar de un dispositivo con un procesador como este. Salvando la falta de 90 Hz o más, el dispositivo es capaz de mover cualquier título que deseemos, como 'Call of Duty: Mobile', 'PUBG Mobile', 'Mobile Legends: Bang Bang' o 'Pokémon GO'. Hemos podido jugar sin lag, tirones o saltos de frames y sin notar un calentamiento más preocupante de la cuenta, aunque sí un ligero aumento de la temperatura de la parte trasera.
Otra novedad que llega a los nuevos iPhone es el 5G. Actualmente en España el 5G no está muy extendido, solo es 5G NSA y que podamos acceder a él o no depende de la ciudad en la que nos encontramos. En mi ciudad no hay 5G, así que no puedo valorarlo. De todas formas 1) ya hemos tenido ocasión de analizar cómo es la experiencia en el día a día con un móvil 5G y, realmente, no hay demasiadas diferencias y 2) los servicios que permiten explotar esta conectividad, como Google Stadia, xCloud o GeForce Now, no están disponibles en iOS, al menos por ahora. Igualmente, actualmente el 5G es una apuesta de futuro y está bien que el iPhone 12 mini lo soporte.
Que el iPhone 12 mini tenga ese notch no es casual, ya que Apple sigue apostando por Face ID como su sistema de seguridad biométrica por defecto. Sin ser el sistema más rápido del mercado, sí hemos notado una mejora en la velocidad de detección. Face ID funciona perfectamente incluso cuando no hay luz, ya que se vale de rayos infrarrojos para mapear nuestra cara. Además, está muy bien integrado con el ecosistema de apps disponibles en iOS.
El ángulo de detección es amplio, similar al de los iPhone 11, y eso es una buena noticia de cara a desbloquear el teléfono en posiciones menos naturales. Sin embargo, al no tener lector de huellas tenemos que levantar sí o sí el teléfono para poder acceder a él, o bien introducir el código de desbloqueo. Como decíamos anteriormente, no habría estado de más tener un lector de huellas bajo la pantalla o lateral, pero lo que tenemos es lo que tenemos y, por fortuna, funciona bien salvo en este tipo de situaciones.
Sobre el uso de Face ID con mascarillas, directamente no funciona. Lo que hace iOS es desplegar más rápido la pantalla para introducir el código de desbloqueo y ya está. Se pueden intentar algunas triquiñuelas para "engañar" a Face ID y que funcione con la mascarilla, pero eso significa sacrificar su seguridad y puede llegar a ser contraproducente.
El apartado del sistema operativo siempre es complicado cuando analizamos un iPhone. A diferencia de los móviles Android, que cada uno tiene su capa de personalización, sus propias opciones y su propia forma de entender el sistema operativo, todos los iPhone son exactamente iguales. iOS 14 (14.2 en nuestro caso) es exactamente el mismo en todos los iPhone, por lo que podríamos remitir a aquellos interesados por las novedades al listado que tenemos publicado en Xataka.
Para el caso, vamos a centrarnos en las novedades más destacadas y en la experiencia con el sistema operativo. La primera y más llamativa novedad son los widgets. Ahora iOS nos permite colocar widgets en la pantalla de inicio y en la panel secundario que hay al deslizar hacia la derecha, algo que ha tardado en llegar y que por fin lo ha hecho. La oferta no es tan variada como la que hay en Android, pero lo que hay funciona perfectamente.
Se echan en falta algunos widgets útiles, como un controlador para Spotify, un acceso que nos permita ver las conversaciones de WhatsApp sin abrir la app, etc., pero algo que gusta es que todos los widgets están muy cuidados, tienen un diseño muy similar a los demás y el diseño de la interfaz muestra cohesión. Es de esos detalles que se agradecen que estén ahí, sobre todo para los que valoramos tener una misma estética en el móvil.
La segunda novedad es el cajón de aplicaciones, y con él tengo mis manos y mis menos. Apple agrupa las apps por orden alfabético y en carpetas temáticas de forma inteligente: las redes sociales con las redes sociales, los juegos con los juegos, y así sucesivamente, pero no permite crear carpetas personalizadas. Sí podemos hacerlas en la pantalla principal, pero no en el cajón de apps. Eso permite que tengamos las apps ordenadas, pero no como realmente querríamos, sino como Apple considera que queremos tenerlas ordenadas. Un ejemplo sencillo: Twitch la mete en la carpeta "Creatividad" y no en la que yo la metería, que sería "Entretenimiento" junto a YouTube y compañía.
Por lo demás, iOS sigue siendo iOS con todo lo que ello supone. Los usuarios de Android seguramente echen en falta más capacidad de personalización, un sistema de notificaciones más intuitivo y más opciones adicionales propias de las capas de personalización, véase una bóveda de apps o un duplicador de aplicaciones.
Ahora bien, aquellos que conozcan iOS se encontrarán con un sistema operativo familiar, con una excelente integración con el resto de productos de Apple (y no tan buena con productos de otras marcas) y un rendimiento sobresaliente. No hemos tenido problemas de lag, caídas de frames, tirones o fallos de estabilidad. iOS 14.2 está muy bien pulido y la experiencia, con sus más y sus menos, es muy satisfactoria.
Y llegamos así al punto más controvertido del iPhone 12 mini: la batería. Apple tiene esa mala costumbre de no publicar los miliamperios hora de su batería, pero gracias al despiece de iFixit sabemos que el dispositivo monta 2.227 mAh. Es algo más que el iPhone SE (2020), pero tampoco es una cifra excesivamente alta. De hecho, en Android bastaría con ver el número para saber que posiblemente vamos a tener problemas de autonomía, pero ya decíamos antes que los mAh en iOS siguen su propio camino.
Igualmente, el iPhone 12 mini tiene menos batería que sus hermanos y eso supone que tenemos una menor duración. No es que sea complicado llegar al final del día si no le pedimos mucho, pero si hacemos un uso más intensivo de la cuenta es probable que para ya entrada la tarde el dispositivo nos pida cargador. Por ejemplo, un día de uso algo más pesado de la cuenta llegamos a las 17:00 con poco menos del 30% de batería.
Haciendo un uso moderado (ver alguna película, redes sociales, hacer algunas fotos y echar alguna partida) nosotros hemos conseguido una media de 5:30 horas de pantalla activa. Para que nos hagamos una idea aproximada de los consumos, una hora de Netflix se tragó un 11% de la batería y 15 minutos de cámara, grabando vídeos y tomando fotos, un 3%. No es la autonomía más alta del mercado, está claro.
Nos vamos acercando al final, no sin antes hablar del apartado fotográfico. A lo largo de este análisis hemos repetido en varias ocasiones que el iPhone 12 mini es un iPhone 12 en miniatura y esto se aplica también a las cámaras, ya que tenemos exactamente el mismo juego de cámaras que su hermano mayor. No hay cambios: son literalmente los mismos sensores, del mismo tamaño y con las mismas capacidades, para lo bueno y para lo malo.
Por un lado, tenemos una cámara principal compuesta por dos sensores de 12 megapíxeles. El principal es un angular estándar con apertura f/1.6 y estabilización óptica de imagen, mientras que el segundo tiene una apertura f/2.4 y no tiene OIS, sino una estabilización automática. La cámara delantera, por su parte, tiene una resolución de 12 megapíxeles con apertura f/2.2.
¿Dónde están las novedades? Con los datos en frío no parece que las haya, pero haberlas haylas. Las principales son que ahora el gran angular y la cámara delantera son compatibles con el modo noche y con Deep Fusion y que la cámara trasera graba vídeo Dolby Vision (a.k.a. vídeo en HDR). Pero decíamos también que hay puntos a tener en cuenta, y es que el iPhone 12 mini, como el iPhone 12, deja caer el telefoto.
FUENTE: Xakata