Cuando se llevan varios meses comprometido con alguien de forma sentimental es fácil caer en eso tan popular que es la monotonía, la pasión incendiaria del principio ha desaparecido y ahora ninguno de los dos sabe qué hacer para encender la chispa y usualmente, el sexo es el que más se ve perjudicado.

Es fácil recurrir a esos momentos sorpresivos, de utilizar juguetes sexuales o tener relaciones en lugares inesperados, pero contar con ese factor sorpresa y espontáneo puede ser perjudicial, es fácil quedarse esperando a que suceda algo y que al final no ocurra nada.

Los expertos recomiendan algo muy sencillo, si usted quiere que suceda algo debe planearlo, esta regla es muy fácil de aplicar en el sexo. Aunque no sea la opción favorita de muchos, así como se planea la visita al odontólogo o regar las matas de la casa, es posible agendar un momento candente con su enamorado.

El solo hecho de tener en mente a su pareja para cuadrar una cita sexual ya demuestra gran interés y puede combatir con ese problema de esperar que el otro le sorprenda desnudo listo para tener relaciones, empezando porque es posible que se le haya olvidado este detalle de la relación.

Recuerde que sí ambos han planeado un momento específico para tener sexo es más fácil que todo se de y es más difícil escapar de la intimidad. Especialistas en sexualidad sostienen que planear las relaciones sexuales podría salvar a más de una pareja.

Ellos explican que al pensar de esta forma se abren las “ventanas de la oportunidad”, sobre todo cuando los dos tienen horarios que no concuerdan. Es bueno ponerse horarios porque así existiría una garantía para que ambos se esfuercen y hagan todo lo posible para tener un momento placentero, y contar con un espacio que los dos acordaron.

Diferentes encuestas demuestran los beneficios de planear esos momentos de sensual intimidad, casi la mitad de las parejas sexualmente actividad planear tener sexo y lo logran de forma exitosa. Entonces sería un error pensar que nadie va por la vida agendando su próximo encuentro sexual.