Has escuchado tantas veces acerca de los prebióticos y probióticos que es probable que no sepas cuál es la diferencia. Es por eso que te contamos qué son y por qué tomarlos.
QUÉ SON
Son fibras solubles, así que atraen el agua durante la digestión. También contienen oligosacáridos, azúcares que alimentan a las bacterias del estómago, de acuerdo con la dietista registrada Bethany Doerfler, investigadora dietética clínica en la universidad Northwestern.
Después de que las bacterias de tu panza se dan un festín de oligosacáridos, liberan ácidos grasos de cadena corta que pueden aliviar las molestias en personas que tienen desórdenes inflamatorios del intestino o padecimientos como
síndrome de intestino irritable.
POR QUÉ TOMARLOS
Si no estás ingiriendo los 38 gramos recomendados de fibra al día, estás en riesgo de padecer estreñimiento (en el mejor de los casos) y enfermedad de corazón (en el peor). Los suplementos de prebióticos ayudan con la ingesta de fibra, pero Doerfler comenta que ella prefiere que gastes tu dinero en alimentos saludables ricos en prebióticos, en vez de suplementos dietéticos.
SI LOS COMPRAS
Elige una mezcla de fibra soluble, como el psyllium, y un oligosacárido que al menos contenga cinco gramos de fibra por porción, aconseja Doerfler. (La etiqueta puede incluir en la lista de ingredientes raíz de achicoria, corazón de alcachofa, insulina u oligosacáridos –es lo mismo.) Ignora las aseveraciones de que son la mezcla “única” de la marca. Simplemente son frases de marketing.
Son microorganismos que se encuentran en alimentos fermentados como el yogurt y el kimchi, explica el doctor Jack Gilbert, investigador de la Universidad de California, en San Diego. Las empresas dicen que sus suplementos de probióticos pueden mejorar tu inmunidad o ayudarte a perder peso. Aún no se confirman por completo esos beneficios, pero la ciencia sí muestra que los probióticos pueden aliviar síntomas de la enfermedad de Crohn, enfermedad de inflamación de intestino y alergias a los alimentos, apunta Gilbert.
POR QUÉ TOMARLOS
Tómalos si padeces de estreñimiento crónico, diarrea u otros problemas gastrointestinales y tu médico te recomienda tomar algo, señala el doctor en medicina David Poppers, gastroenterólogo de la Universidad Langone en Nueva York. Todos los demás pueden ahorrarse su dinero porque no hay evidencia de que los suplementos de probióticos aporten ningún otro beneficio a las personas sanas, admite Gilbert.
SI LOS COMPRAS
Tu médico te recomendará algún probiótico que haya demostrado ayudar con tus síntomas en específico, advierte el Dr. Poppers. Por ejemplo, una bacteria, lactobacillus rhamnosus GG, es ideal para quienes tienen diarrea, en comparación con otras cepas, dice Gilbert.
Si eres un hombre sano sin problemas gastrointestinales, invierte en alimentos ricos en fibra y no en suplementos. No obstante, ve al médico si sospechas que tienes alergia a algún alimento o algún padecimiento de intestino irritable y eso te causa molestias estomacales. Lo ideal es dejar que el médico te diga qué pre o probiótico debes tomar.
FUENTE: Mens Health
