12 Cosas que no te dijeron antes de perder tu virginidad (versión gay)

En el caso de las relaciones heterosexuales, se dice que la virginidad de pierde en la penetración. En el caso de las relaciones homosexuales, es posible pensar que existen tener tres momentos de "pérdida de virginidad": la primera vez que hay intimidad con otro hombre sin penetración, la primera vez que hay intimidad como pasivo y la primera vez que hay intimidad como activo.

Es probable que ya hayas probado alguno de estos tres casos, todos, o ninguno de ellos. En cualquier caso, hay detalles que no te dicen en ninguno de los casos antes de probar. Dale un vistazo a estas 12 Cosas que no te dijeron al perder la virginidad (versión gay).

A) Sexo sin penetración

1. Si, esa primera vez cuenta

Esa primera vez en que te decidiste "saltar la barrera", dejar de lado todo lo aprendido desde niño y dar paso a la curiosidad, olvidarte de lo que dice la iglesia, pasar por encima de los prejuicios de tus amigos y la sociedad... si... esa primera vez, no te hagas el loco, esa primera vez cuenta.

No importa si sólo fueron besos. Mucho menos si sólo fueron caricias o una masturbada juntos. Fue tu primera vez. Y si hubo sexo oral pues ni se hable más. Tu primerísima vez. Nunca te lo dijeron pero para tu primera vez no era necesario que existiera una penetración. No en el caso de los gays. Fue tu primera vez en donde tuviste intimidad con otro hombre. Jamás la olvidarás.

2. Si te gusta, querrás repetir

Es ley de vida. Uno repite de lo que le gusta. Eso no excluye al sexo. A menos que seas un bicho raro, si te gustó la intimidad con otro hombre, vas a querer más. Y si la primera vez sólo fueron unos besos y unas caricias, en el futuro querrás muuuuuucho más.

Si te gustó aquél encuentro, tarde o temprano intentarás forzar una situación como aquella primera vez. Por más arrepentido que estés, por más dramas morales que tengas o encomiendas a Dios que realices, volverás a repetir. Nunca te lo dijeron, pero una vez que pruebas, casi siempre te quedas. Tu cuerpo lo pedirá a gritos. Sucumbirás.

Harás uso de tus medios disponibles: una computadora/ordenador, tu teléfono, sitios de "cruising", saunas, discotecas, etc. Créeme... si te gustó querrás repetir. Una sola vez no bastará.

B) Sexo como activo

3. Ponerte el preservativo no es fácil

Seguramente ya habías tenido sexo con chicas y fue "pan comido".

Pero tal vez eras un "gay puro", es decir, un hombre que nunca ha tenido sexo con alguien del sexo opuesto. Si ese fue tu caso, nadie te dijo que por muchas clases de educación sexual que tuviste, tutoriales de Youtube que te hayas visto o películas porno que disfrutaste, ponerse el preservativo tenía su técnica.

Inclusive, abrir el envoltorio tenía su técnica. Nadie te dijo que ibas a estar nervioso y tus manos sudarían tanto que se te haría difícil abrir el envoltorio de tu primer condón. Pero finalmente abriste "la golosina". Y lo hiciste... Esa otra primera vez... imposible de olvidar... ¿no?

4. A veces no es fácil tampoco conseguir el orificio

Si... nadie te dijo sobre la posibilidad de perder un buen rato buscando el orificio de acceso una vez colocado el preservativo. Para ti era evidente dónde encontrarlo. Jamás pensaste que podía resultar en todo un laberinto. Nadie te lo dijo. Y menos que no iba a ser una vez sino varias, porque en el camino se salió más de una vez y había que volver a buscar.

Afortunadamente, con el tiempo supiste que no era tan difícil encontrarlo... Menos mal.

5. Los fluidos corporales de tu pareja son normales

Salió y el condón salió "sucio" y aun no habías terminado. Nadie te dijo que eso podía pasar. Quizás te alarmaste y hasta se te cortó todo el rollo. Nadie te dijo que era una posibilidad perfectamente normal. A través de ese orificio se expulsan desechos. Nadie te dijo que si eso pasaba lo que tenías que hacer era retirar el preservativo con cuidado y cambiarlo por uno nuevo, "aquí no ha pasado nada" y pum!, pa dentro! para seguir disfrutando.

Nadie te dijo que afortunadamente eso no pasa siempre. Que se disfruta mucho más cuando no ocurre, pero si sucede pues no hay rollo, que es perfectamente normal ¿Qué esperabas encontrar? ¿Que saliera el condón limpiecito y con aroma floral?

6. Si tu contraparte dice que le duele... es porque de verdad le duele!!!

Nadie te dijo queel ano no lubrica como la vagina, y que por ello, al principio debes entrar lentamente . Que no podías ir a mil por hora. Tampoco te dijo nadie que una vez el orificio se ha dilatado, puedes ir al ritmo que quieras... bueno, al ritmo que quiera y pueda tu compañero sexual.

Con el tiempo aprendiste que si tu compañero sexual es experimentado, es mucho más fácil que si se trata de un pasivo primerizo, con quien tienes que ser más considerado.

7. Es probable que no disfrutes como activo

Nadie te dijo que era probable que no disfrutaras como activo. Pensabas que tu primera vez sería diferente. Pero era normal. Salvo casos contados, nadie nace sabiendo cómo se hacen las cosas, ni qué es lo que te va a gustar de una actividad que nunca antes has realizado.

A veces los nervios y la inexperiencia hacen que el disfrute sea menos. Afortunadamente, con el tiempo supiste que lo tuyo era otra cosa o luego le conseguiste el gusto al sexo como activo y aprendiste a disfrutarlo hasta hacerte un experto.

C) Sexo como pasivo

8. No, no es tan fácil como en las películas porno

Nadie te lo dijo. Nadie te dijo que los actores de las películas porno ya son todos unos expertos en el arte de la relajación. Pensaste que sería fácil ser pasivo y quizás tuviste que abortar la secuencia de acción y dejarlo para otro día. No sabías que podía ser tan doloroso.

Afortunadamente, con el tiempo aprendiste que lo tuyo era otra cosa o sencillamente descubriste cómo relajarte, a respirar profundo, y a disfrutarlo.

9. Debes aprender a conocer cuándo puedes tener sexo

Si bien los fluidos son perfectamente normales, lo ideal es que cuando el condón salga luego de penetración, lo haga lo más limpio posible. Seguramente te hablaron de los lavados, pero esa práctica no es buena para la flora intestinal.

Afortunadamente, con el tiempo aprendiste a conocer tu cuerpo, hasta saber cuándo puedes hacerlo y cuando no es prudente. Y también aprendiste que si te equivocas y sale sucio no se va a acabar el mundo. Somos humanos. Solo es una cuestión de cambiar el condón y seguir en la pelea.

10. Te pueden decir cómo hacer algunas cosas, pero tu también puedes hacerlo

Tu primera vez fue con alguien experimentado pero nunca te dijo nadie que posiblemente en tu primera vez te dijeran cómo hacer algunas cosas y que tu podías hacer exactamente lo mismo. Es más, que deberías hacerlo siempre!!! Hay muchos activos que piensan en "descargarse" y listo!, olvidándose de la persona que tienen junto a ellos y que también tenían el derecho de disfrutar.

Afortunadamente con el tiempo aprendiste que en el sexo es importante que ambos disfruten. No sólo una parte del cuento.

11. Se puede llegar al orgasmo juntos

Nunca nadie te dijo que se puede llegar al orgasmo juntos. Pensabas que siempre él llegaba primero por ser el activo y estar dentro de ti. Creías que tu siempre llegarías de segundo.

Afortunadamente con el tiempo descubriste posiciones para permitir que ambos lleguen al orgasmo al mismo tiempo.

12. Es probable que no disfrutes como pasivo

Nadie te dijo que era probable que no disfrutaras como pasivo. Al igual que en el caso anterior, pensabas que tu primera vez sería diferente. Pero era normal. Tenías que probar. Aquí aplica algo similar que en el caso de los activos. A veces los nervios y la inexperiencia hacen que el disfrute sea menos.

Afortunadamente, con el tiempo, supiste que lo tuyo era otra cosa o descubriste cómo disfrutarlo. Y a disfrutarlo un montón... goloso!!!