Un nuevo estudio encontró esta sorprendente relación.

Tu pene dice mucho de tu salud. Mientras que padecer problemas para tener una erección, puede ser señal de problemas con el flujo sanguíneo que ponen en peligro al corazón, el cómo se ve tu miembro, también puede ser indicativo de algo: un nuevo estudio de la Colegio Médico de Baylor, sugiere que la enfermedad de Peyronie (condición en la que tejido cicatrizado puede curvar el pene) puede incrementar el riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer.

En el estudio, los investigadores analizaron reclamaciones de pólizas de seguros de más 1.7 millones de hombres, algunos con problemas como enfermedad de Peyronie o disfunción eréctil y otros sin problemas en el pene. Luego les dieron seguimiento durante nueve años.

Luego de ese periodo de tiempo, los investigadores descubrieron que los hombres con la enfermedad de Peyronie tuvieron 43 por ciento mayor probabilidad de desarrollar cáncer de estómago; 39 por ciento mayor probabilidad de desarrollar cáncer testicular; y 19 por ciento mayor probabilidad de desarrollar melanoma, que los hombres sin problemas en el pene. También hubo una mayor tendencia hacia el cáncer de próstata, aunque en el análisis no obtuvieron un resultado estadísticamente significativo.

Después, los investigadores llevaron los datos más allá, al examinar la relación entre las dos enfermedades a nivel molecular. Secuenciaron toda la composición genética de padre e hijo que tenían la enfermedad de Peyronie y una afección relacionada llamada contractura de Dupuytren, que causa un engrosamiento anormal del tejido de la palma y los dedos.

“Cuando secuenciamos sus genomas, encontramos que tenían múltiples mutaciones que los ponían en riesgo de padecer ciertos tipos de cáncer”, explicó el doctor Alexander Pastuszak, autor del estudio y urólogo en el Colegio Médico de Baylor. “Esto brinda mejor evidencia de que estas enfermedades están vinculadas,” Las mutaciones que descubrieron en los pacientes son las mismas vinculadas al cáncer gástrico y genitourinario, incluyendo los de próstata y testículos. Esto sugiere que puede haber un factor que activa tanto la enfermedad de Peyronie y estos tipos de cáncer.

¿Qué significa esto para ti? Primero, no te vuelvas loco si notas una ligera curvatura en tu pene, no significa necesariamente que tienes enfermedad de Peyronie.

“Una ligera curva puede ser normal”, indica el doctor Pastuszak. “Todos los penes tienen curvatura”.

No hay un tipo de curva que sea señal de enfermedad de Peyronie, según la Asociación Americana de Urología de Estados Unidos. ¿Qué puede ser indicador? Si notas que la curva del pene aparece de repente o que cada vez se pronuncia más, indica el doctor Pastuszak. Si notas estos síntomas, especialmente si te están provocando dificultades para tener sexo o causando cualquier tipo de molestia, acude a tu médico.

Pero, incluso si tu doctor te diagnostica enfermedad de Peyronie, no te espantes, sugiere. Esto no significa que en automático tendrás cáncer.

Lo que sí, es que tienes que vigilar de cerca tu salud. Esto puede significar hacerte chequeos periódicos en busca de cáncer, especialmente de los tipos que ya hemos mencionados, vinculados a la enfermedad de Peyronie.

Dicho esto, no hay exámenes de rutina para detectar otros tipos de cáncer relacionados con Peyronie, como el cáncer de estómago. Ahí es donde entra la vigilancia: aprende los síntomas que, en el caso del cáncer de estómago, incluyen acidez estomacal, náuseas y sensación de saciedad después de comer una comida pequeña, así que si comienzas a experimentarlos, puedes comentarlo rápidamente a tu médico. La detección temprana es a menudo clave para combatir el cáncer.

Los resultados muestran lo importante que resulta, para los hombres con la enfermedad de Peyronie, continuar con una estrecha comunicación con su doctor incluso luego de ser diagnosticados con la curvatura.

“Vale la pena acudir al doctor una o dos veces al año para asegurarse que todo está bien,” sugiere el doctor Pastuszak. Esto te dará oportunidad de hablar con tu doctor sobre los beneficios de más pruebas o exámenes.