Siempre que una pareja quiere vivir gratos momentos llenos de placer, recurre a la estimulación de las llamadas zonas erógenas, que como indica plannedparenthood.com, son áreas determinadas de nuestro cuerpo que nos provocan excitación cuando las tocan.
Ya sabemos que acariciando y tocando correctamente los órganos sexuales, así como otras partes del cuerpo tales como la espalda, las orejas, piernas y cuello nos provocarán esa sensación de deseo y de querer vivir aún un momento mucho más íntimo.
Pero aunque no lo creas, todo nuestro cuerpo posee cientos y cientos de terminaciones nerviosas por lo que hay varias partes de nuestro organismo que se convierten en perfectas fuentes de placer.
Los sitios nosotras.com, así como tiffotos.com, nos enseñan 10 puntos que nos proporcionan placer y que quizá desconozcas. En De10.mx te decimos cuáles son estos para que pongas manos a la obra y practiques tus mejores técnicas.
1. La curvatura del labio inferior. Nos referimos exactamente al punto central de tu labio inferior que prácticamente se convierte en la barbilla, pues en ese punto convergen decenas de terminaciones nerviosas, las cuales bien estimuladas provocan el máximo placer.
Se recomienda que para estimular esta zona debes besar al otro apasionadamente, succionando un poco y sutilmente esta parte de la boca. Con tu lengua, haz pequeños masajes de arriba hacia abajo y sorprende a tu hombre aprisionando el labio con tu boca, sensación que le provocará un tipo de descarga directa en el pene.
2. La manzana de Adán. Como verás, este punto es exclusivo de los caballeros. Esta parte de la fisonomía masculina, la cual resguarda a la glándula tiroides, está íntimamente relacionada con todos los genitales.
Te recomendamos que lo acuestes boca arriba, con una almohada en la cabeza para que ésta levante un poco su cuello; moja tus labios y ve dando besos tiernos en la zona y cuando llegue al corazón de la manzana, utiliza tu lengua para seducirlo.
3. Los tobillos. Precisamente entre el talón y el hueso de los tobillos hay un punto nervioso que está ligado de manera directa a los genitales. Sabiendo esto, puedes iniciar la sesión romántica dándole un pequeño masaje en los pies, haciendo un poco de presión en esta zona.
También, durante el acto sexual, colócate cerca de las plantas y estimúlale apretando este punto, siguiendo el ritmo de sus movimientos, verás cómo con esto él alcanzará gran excitación.
4. Los pezones de los hombres. Es por todos conocidos que uno de los puntos más sensibles en las mujeres son los senos y por lo tanto, los hombres concentran gran parte de su atención en estimularlos para lograr un momento sexual inolvidable.
Sin embargo, olvidan que para ellos también esta parte del cuerpo les produce una reacción positiva cuando se les estimula de manera correcta. Con la lengua recorre sus pezones y vez haciendo pequeños mordiscos que vayan subiendo de intensidad, lo cual le hará sentir cosas gratas en todo su cuerpo. Si chupas un hielo antes de hacerlo, te garantizamos mayor éxito.
5. Perineo. Es la zona que va de los testículos al ano y es ahí en donde se localiza la próstata, una de las glándulas masculinas que poseen un poder altamente orgásmico.
Pocas veces se toma en cuenta esta parte del cuerpo, así que desde ahora provócalo dándole besos, caricias con la lengua, así como pequeños mordiscos y sutiles caricias con tus dedos. Si lo que quieres es que él alcance el clímax, entonces aprieta con mayor fuerza para que así ambos lleguen al orgasmo.
6. El pliegue entre los testículos. Es precisamente la parte en donde se juntan los testículos con la base del pene. Pocos exploran esta parte del cuerpo de sus parejas, dejándolos en el olvido y perdiéndose, quizá, de una oportunidad de oro para vivir una sesión candente de sexo.
La mejor forma de estimular esta área es acariciando la parte inferior de los testículos y ejerciendo un poco de presión en el pliegue; sube y baja tus dedos pausadamente en dirección hacia el escroto. Si lo haces adecuadamente, le regalarás a tu pareja un momento de infinito placer.
7. La punta del pene. Quizá siempre te esfuerzas en estimular por completo a este miembro y descuidas la punta, lugar en donde se concentran todos los nervios relacionados con la sexualidad masculina.
Así que la próxima ocasión, trata de estimular al miembro por completo. Podrías untarte lubricante en las manos y hacer un pequeño y delicado masaje con tus dedos o bien, rózalo con tus labios o frótalo en tu boca, sin llegar a nada más. Te aseguramos que le generarás a tu pareja una sensación inigualable.
8. Frenillo. Es precisamente la parte del pene que une el glande con el resto del miembro. Pocos en realidad saben que acariciándolo de forma adecuada, le darán a su pareja el total de los placeres sin hacer un gran esfuerzo.
Intenta sujetar la base del pene y en la punta, haz con la lengua círculos pequeños y lentos y mueve tu mano de arriba hacia abajo, esto lo dejará sin aliento.
9. Las ingles. Es una de las partes más sensibles del cuerpo, sobretodo la cara interna de los muslos, así que recorre con tus dedos la pierna de tu pareja, desde la cadera hasta la parte interior de los muslos. Dale un plus acompañando esta acción con una buena sesión de besos y caricias con las cuales calentarás motores.
10. El ombligo. Según sitiosespana.com, es una de las zonas erógenas más fuerte de todo el cuerpos. Besos y caricias alrededor de él tiene un matiz altamente sensual para ambos.
Trata de hacer caricias en la parte baja del ombligo hasta llegar al pubis, esto hará que tu pareja se relaje e incrementa el deseo sexual, debido a las terminaciones nerviosas que se encuentran en el área.
FUENTE: La Patilla