La depresión es uno de los problemas de salud mental más comunes. Según la OMS, se estima que 300 millones de personas a nivel mundial la padecen. Afecta a niños, adolescentes, adultos, mujeres... y hombres también.
Evidentemente, los hombres son parte de esos 300 millones de personas pero su forma de afrontarla es completamente diferentes. "En muchos casos se presenta de manera silenciosa u oculta, sobre todo en niños y en hombres adultos. Los niños no cuentan con los recursos internos necesarios para poder articular lo que sientes y cómo la depresión les afecta a su vida diaria, pero los hombres deberían ser capaces de expresar la dinámica de su mundo interior", asegura Claudia Rodríguez Acosta, psicoanalista.
"Dependiendo de la cultura en la que estamos inmersos, es difícil que el hombre hable de lo que siente e incluso que lo identifique, al hombre se le educa para ser fuerte y exitoso". ¿Todavía seguimos creyéndonos eso? La depresión masculina existe y es algo muy común, pero se suele confundir con otros términos como estrés laboral, irritabilidad, ansiedad... "o camuflar en adicciones al alcohol, las drogas, el sexo, los videojuegos o el trabajo", indica la especialista.
También es común que los hombres consulten al médico por padecimientos físicos: de migraña, cansancio, insomnio y dolencias físicas hasta problemas del corazón, patologías que son más aceptadas pero que pueden esconder un problema de origen emocional.
La lista de síntomas es amplia, pero según Claudia Rodríguez Acosta, "para centrarnos, la característica principal de la depresión es la dificultad para vivir y para disfrutar de la vida. Puedes sentir una tristeza constante, indiferencia y falta de motivación, mal humor, agresividad e irritabilidad, la depresión incapacita para rendir en el trabajo y disfrutarlo, inhibe la creatividad y dificulta el acercamiento con amigos y familia cercana".
“La depresión no discrimina, creo que es una parte importante de mi pasado y por eso lo comparto". Dwayne Johnson, toda una estrella de Hollywood y uno de los hombres más fuertes (físicamente) del mundo ofrecía esta relato en la televisión americana. “Tienes que hablarlo, no estás solo en esto”.
No es la única figura que ha reconocido ir a terapia. Hace unos días escribíamos sobre Michael B. Jordan. El actor de 'Black Panther' reconocía que tuvo que ir a terapia tras hacer el filme. Al compartirlo en nuestro Instagram, no todo el mundo entendía que tuviera esos problemas de salud mental.
También deportistas de élite como Andrés Iniesta, Tony Adams o Michael Phelps han hablado de la depresión masculina, abriendo camino a que muchos hombres se reconozcan en sus casos. Para la psicoanalista, "los tratamientos con los hombres pueden ser más complicados, ya que no es usual que el hombre se muestre vulnerable y dispuesto a hablar de su fragilidad". Sin embargo, pensadlo, ¿no es la mayor prueba de fortaleza querer ser feliz?
Si la suma de síntomas se acumulan, es importante acudir con un profesional para poder hacer una valoración más detallada de lo que está pasando. No necesariamente quiere decir que por tener algunos de estos síntomas estés deprimido, pero sí quieren decir que algo no anda bien.
Ya que he identificado que algo no anda bien, no hay que tirar del viejo refrán de "el tiempo todo lo cura". Al contrario, dejarlo pasar puede traer consecuencias mucho más dañinas y que la depresión te afecte a otras áreas de la vida (crisis en la pareja, un despido por bajo rendimiento, distanciamiento de la familia...).
Se recomienda hacer un ejercicio reflexivo para identificar desde cuándo uno se siente así y qué eventos agudizan o disparan ese malestar. Hay casos en los que la depresión se arrastra desde la infancia o bien ha podido ser activada por alguna separación, pérdida o cambio, no necesariamente negativo: cambio de trabajo, mudanza, casarse, nacimiento de un hijo.
Dejar la depresión como un asunto privado es perfectamente válido, pero eso no quiere decir que no se consulte con un profesional. Comunicar a familiares y amigos las dolencias físicas y emocionales es una decisión personal, hay gente a quien le funciona y hay a quienes no, pero la consulta profesional es otra cuestión. Buscar una valoración y tratamiento profesionales ayuda a mejorar la calidad de vida.
Los hombres no son los únicos afectados por los estereotipos y los ideales sociales, en general, vivimos en un mundo que tiende a sobre valorar lo positivo y no querer ver lo negativo, que promueve la felicidad, la estabilidad y el éxito, como únicas metas valiosas, que se vuelven aún más valiosas al conseguirlas de manera fácil y rápida, sin tener que transitar por la frustración y el dolor.
Sin quejarse, sin hablar y sin expresar lo difícil de la vida. Para poder iniciar un tratamiento, lo primero es reflexionar sobre los prejuicios que tenemos cada uno. Hombres y mujeres pueden ser exitosos y vulnerables a la vez, una cosa no excluye a la otra.
La depresión se puede tratar de diversas formas. A veces con ayuda de medicamentos, pero no necesariamente. Lo que sí es necesario es comprometerse a seguir el tratamiento sugerido por el especialista. No será fácil ni rápido, ya que implica enfrentarse a partes de uno mismo de las que nunca se ha querido saber, pero si lo consigues podrás sentirte muy orgulloso de ti mismo.
FUENTE: Mens Health