En los últimos años en Barcelona se observa un descenso en la incidencia de la infección por el VIH. Esto es consecuencia del esfuerzo que se ha realizado desde todos los ámbitos (asistencial, comunitario y de salud pública) pero, a pesar de esta buena noticia, el VIH sigue siendo una de las enfermedades de declaración obligatoria más frecuente en nuestra ciudad. En este sentido, tenemos que mencionar que existe una proporción de personas infectadas y no diagnosticadas, aproximadamente una cuarta parte de los casos, que pueden transmitir el virus sin saberlo. Es una de las razones por las cuales la epidemia todavía es difícil de controlar del todo.
La administración de fármacos antirretrovirales utilizados como profilaxis preexposición (PrEP) en personas no infectadas y expuestas al VIH se ha demostrado altamente eficaz para evitar la infección en personas que forman parte de colectivos vulnerables, como es el caso de hombres que tienen sexo con hombres. El número de parejas sexuales, el tipo de prácticas sexuales y el diagnóstico de infecciones de transmisión sexual (ITS) son factores que permiten identificar a las personas con mayor riesgo de contraer el VIH.
Actualmente en Barcelona se están llevando a cabo diversos estudios de implementación de la PrEP. Son necesarios para definir procedimientos y circuitos de dispensación; determinar su aceptabilidad y potencial impacto; identificar responsabilidades de los diferentes niveles de actuación y analizar los aspectos económicos. De esta manera se puede complementar la información necesaria para establecer recomendaciones de usos de la PrEP. Porque en definitiva, la PrEP tiene que incluirse en los programas de prevención y control de la infección por VIH de forma integrada con el resto de estrategias de eficacia contrastada como son la promoción de la salud sexual, el uso del preservativo, la formación, el consejo asistido, el diagnóstico y el tratamiento precoz de las personas infectadas. Todas ellas tienen que seguir siendo piezas clave en la lucha contra el VIH y el sida.
La PrEP tiene que ser prescrita en unidades asistenciales que reúnan unos requisitos mínimos para garantizar el correcto funcionamiento de la intervención, aunque en la captación de personas susceptibles para su uso se podrían incorporar centros comunitarios.
La agencia del medicamento estadounidense fue la primera en incluir la PrEP en abril de 2012. Hoy en día está incorporada en la US National HIV/AIDS Strategy publicada en julio de 2015 como un componente más de la prevención. Actualmente, otros países han aprobado esta ampliación de la indicación o están en vías de hacerlo. El 22 de julio de 2016, el Comité de Medicamentos de Uso Humano de la Agencia Europea de Medicamentos emitió una opinión positiva sobre la PrEP, en combinación con otras medidas preventivas y prácticas sexuales más seguras para reducir el riesgo de infección por VIH en adultos con alto riesgo.
Después de esta opinión positiva, en agosto de 2016 la Comisión Europea adoptó la resolución por la que se modificó la autorización de la comercialización del medicamento relativo a la PrEP (Truvada®) para incluir su uso en la profilaxis preexposición. A continuación, el laboratorio titular de la autorización tiene que iniciar los trámites para que cada Estado Miembro adopte una decisión sobre su precio, financiación y las condiciones de uso efectivo en el contexto de sus políticas y servicios de salud.
El proceso de implementación de la PrEP en España se encuentra detenido en algunas actuaciones administrativas como son la fijación de precios, la implementación, el informe sobre el posicionamiento terapéutico y la consulta pública de la cartera de servicios. De esta manera, las personas interesadas en la utilización de la PrEP solo la pueden conseguir fuera del circuito normal de la sanidad pública o privada y, además, no se realizan los controles médicos de seguimiento, adherencia y efectos adversos, lo cual puede conducir a asumir riesgos substanciales. Adicionalmente, no podemos obviar que el VIH es una de las infecciones declaración obligatoria más frecuente en nuestra ciudad. Por todo ello, es preciso incorporar un instrumento más en la lucha contra el sida, regulando la utilización de la PrEP y incluyéndola en las prestaciones sanitarias.
El pasado día 16 de noviembre, la Comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados aprobó por unanimidad una proposición no de ley que instaba al Gobierno a facilitar el proceso para implementar la PrEP e incluirla en la cartera de Sistema Nacional de Salud. Desde el Ayuntamiento de Barcelona nos sumamos a la demanda al Gobierno para que próximamente la implementación de la PrEP sea una realidad. Mientras tanto, e Barcelona seguiremos impulsando todas las estrategias preventivas para hacer frente al VIH: la promoción de la salud sexual, el uso del preservativo, la formación, el consejo asistido y el tratamiento precoz de las personas infectadas. Todo ello, a partir del trabajo de la Agencia de Salud Pública de Barcelona (ASPB), del apoyo a las entidades comprometidas que trabajan en esta dirección y también del impulso de las organizaciones sanitarias de la ciudad.
FUENTE: El Diario