No sólo importa la intensidad de entrenamiento o la forma en que organizamos el mismo, sino también factores externos que pueden influenciar nuestro trabajo tales como la hora del día en que nos ejercitamos. Por eso, hoy nos preguntamos ¿cuál es el mejor momento del día para entrenar? A continuación, intentaremos dar respuesta a este interrogante.
Para determinar cuál podría ser el mejor momento del día para entrenar, debemos tener en cuenta diferentes factores que afectan el mismo, por ejemplo: la temperatura, la luz solar, nuestros propios ritmos fisiológicos, hormonas, entre otros.
Así, se sabe que hormonas que favorecen el rendimiento y que podrían ser claves para ganar masa muscular son superiores cerca de las 12 horas del día y a media tarde, alrededor de las 18 horas.
En este momento, tendremos picos de testosterona y caídas de cortisol, por lo que podremos rendir más y aprovechar esta hormona tan importante para ganar músculo.
Sin embargo, con un entrenamiento intenso y una dieta adecuada, también podemos elevar esta hormona en el organismo.
También es posible reducir los niveles de cortisol si descansamos adecuadamente y no caemos en dietas extremas o situaciones estresantes para el organismo.
Por otro lado, un estudio reciente señala que nuestros músculos son más eficientes durante las horas de luz solar o en horas de vigilia, pues nuestro reloj biológico determina que es el momento adecuado para el esfuerzo.
Esto coincide con una investigación que concluye que la luz solar eleva la actividad metabólica, volviéndonos más capaces de rendir al máximo durante el día o durante las horas de luz solar.
Aunque la ciencia indica que hay momentos de mayor rendimiento que generalmente son durante el día, debemos considerar algunos factores del entrenamiento que pueden condicionar nuestro trabajo y desempeño.
Por ejemplo, nuestros músculos cogen temperatura y flexibilidad a medida que avanzan las horas del día, por ello entrenar duro o con movimientos que requieren mucha elasticidad a primera hora de la mañana no sería lo más aconsejable.
Si queremos prevenir lesiones y rendir más, lo ideal será realizar una rutina HIIT, saltos, o bien ejercicios que impliquen rotación o flexión de columna pasadas las dos horas de habernos levantado y si es posible, por la tarde, pues como hemos dicho, la temperatura y flexibilidad corporal se incrementan a medida que avanza el día.
Teniendo en cuenta todo lo antes dicho, es claro que no hay un momento ideal apto para todos para realizar el entrenamiento sino que mucho depende de nuestras características personales.
De acuerdo al tipo de trabajo, al objetivo del entrenamiento, a nuestro horario laboral y demás posibilidades, encontraremos el mejor momento del día para ejercitarnos.
Si eres una persona que siempre ha rendido más intelectual y físicamente por la noche, sin duda tu mejor momento de entrenamiento es éste, mientras que si trabajas por la tarde y sólo puedes ejercitarte por la mañana, no deberías desaprovechar esta oportunidad.
Es claro que podemos tener ritmos biológicos diferentes, rutinas y necesidades muy distintas, por lo tanto, el mejor momento de entrenamiento es aquel que nos quede cómodo, que podamos respetar y que nos permita sentirnos a gusto con la actividad.
Por ejemplo, siempre he ido al gimnasio cerca del mediodía, pero para correr, mi cuerpo indica que el mejor momento es por la tarde- noche, sobre todo, cuando en verano las horas de luz solar acentúan el calor y deterioran el rendimiento.
Y para vosotros, ¿cuál es mejor momento del día para entrenar?
FUENTE: trendenciashombre
