Cómo depilarse el ano
Mantener un ano depilado es una práctica cada vez más común, sobre todo en los hombres quienes son los que suelen tener esa área más velluda.
A pesar de que existen muchos métodos de depilación para esta delicada zona del cuerpo, no todos son recomendables y menos para hacerlos en la comodidad de tu hogar.
Métodos no recomendables
A pesar de que muchos digan lo contrario, aplicar cera en esa área, ya sea caliente o fría, es una pésima idea de la cual prácticamente todo puede salir mal si no lo hace un profesional. Aspectos como líquido dentro del culo, irritaciones o infecciones podrían ocurrir en caso de tratarlo de aplicar por ti mismo.
Por la misma línea se encuentran las cremas depilatorias, que podrían causar escozor en la zona, infecciones o quedar un poco en el interior del ano.
Pero no todo es negativo, ya que hay dos formas asombrosas para poder depilarse el ano sin dolor.
La primera de ellas podrás realizarla por sí mismo en la comodidad de tu hogar y se trata de rasurarte. Su mayor ventaja es que es económico y te llevará poco tiempo, pero por otro lado, el resultado durará tan solo un par de días.
Otro método asombroso es usando depiladoras eléctricas, o su contraparte manual, las pinzas de cejas de toda la vida. Dolerá un poco pero es un malestar soportable tan solo por unos segundos. Lo bueno es que es un método muy duradero, que podrás disfrutar hasta 4 semanas hasta que los horribles pelos vuelvan a crecer
En cambio, el láser es una opción asombrosa si buscas eliminar esos molestos vellos de manera permanente, eso sí, requerirás de ir varias sesiones a la estética y podría resultar un poco costoso.
A continuación te explicaremos los más eficaces y sencillos métodos para depilarse el culo, sin que te cortes una nalga en el proceso.
Antes de empezar con todo el proceso, es sumamente importante contar con una excelente rasuradora. De esta manera evitamos heridas en esta zona.
Trata de usar una afeitadora nueva o que tenga muy poco uso, así garantizas que sus hojillas se encuentran sumamente filosas para poder eliminar todos los vellitos de una sola pasada.
Jamás uses la afeitadora para el culo que usas para rasurarte el rostro. Recuerda que aunque tu trasero esté limpio, suele tener bacterias y al afeitar la piel queda sumamente expuesta, siendo muy propensa a que microorganismos indeseados causen alguna irritación.
El cabezal movible es un aspecto sumamente importante, ya que de esta manera sabrás que se irá ajustando a la curvatura de esa zona de la piel, ofreciendo una mejor afeitada en una sola pasada y sin riesgos de cortes.
Por último, aléjate de las desechables económicas. Lo mejor es que consigas alguna con hojillas de buena calidad, y sobre todo, para pieles sensibles, o bien, que tengan muy poca separación entre sus filos. Esto te permitirá reducir la posibilidad de lastimarte mientras te rasuras.
En el caso de la depiladora eléctrica, lo recomendable es contar con alguna que tenga una boquilla mediana o pequeña, para así tener mayor precisión y que no te quite todos los vellos en un segundo, ya que podría resultar doloroso.
También existen algunas depiladoras de boquilla ancha pero que poseen cabezales que reducen su tamaño, por lo que podrían ser ideales para esta zona.
Las pinzas de cejas son asombrosas para esta finalidad. Aunque si tienes una jungla en esa zona, podría tomarte más tiempo del que te gustaría.
Previamente antes de empezar la sesión de depilación es sumamente importante tener la zona limpia, por lo que es recomendable bañarse, con el fin de asegurarnos que no tenga suciedad o alguna case de residuos.
En caso de que vayamos a rasurarlos, aplicamos crema de afeitar en el culo cuando ya lo tengamos seco. Recuerda que esta zona es sumamente delicada, por lo que no colocar esta clase de productos te podría traer picazón o irritación en la zona.
Nos situamos de espaldas al inodoro y posicionamos un espejo sobre éste que apunte hacia nuestro trasero.
Debajo de nosotros colocamos nuestra canasta de la ropa vacía, recuerda que ésta no debe de tener ninguna clase de agujeros. Su función principal es atrapar todos los pelitos, de manera que luego puedas botarlos mucho más fácil sin que terminen volando por todo el baño.
Seguidamente, hacemos una sentadilla con las piernas un poco separadas y el tronco hacia delatante, de manera de tener mayor visibilidad sobre la zona.
Con nuestra mano diestra sostenemos la rasuradora, depiladora o pinzas, mientras que con la contraria tenemos un espejo que enfocaremos con el que se encuentra sobre el inodoro. De esta manera tendremos una perfecta visibilidad del área para saber si hay vellitos residuales.
Ahora procedemos a extraer los vellos. En caso de usar la pinza, quítalos de uno en uno hasta dejar la zona lampiña. Con el caso de la depiladora, lo mejor es irla pasando lentamente por la zona. Por su parte, con la afeitadora, el movimiento es del centro hacia afuera, para evitar que los pelitos se incrusten al crecer.
Lo idóneo es que mientras vayas depilando, muevas los espejos para verificar si quedan espacios sin depilar.
Cuando ya tengas el culo sin ningún rastro de pelos, lo mejor es bañarse nuevamente. Eso sí, dado que esta zona se encuentra delicada, no talles. Igualmente cuando tengas que secarlo, hazlo a toquecitos en vez de frotar, ya que de esta manera te evitas una irritación.
Ahora solo te queda proceder a aplicar alguna crema post-depilatoria, para así brindarle la hidratación a esta zona que tanto necesita luego de haberla rasurado.
Ya no tienes excusas para tener el trasero peludo antes de un encuentro romántico con tu pareja, así que ponte manos a la obra cuanto antes, para librarte de todos esos vellos que tienes en la retaguardia.
FUENTE: Depiladoras