Con la llegada del buen tiempo a casi todos nos aparece la prisa por perder esos kilos de más que hemos ido ganando en invierno. Muchas son las personas que recurren a la práctica del ejercicio y a mejorar su dieta para conseguir reducir su peso corporal, pero muchas veces no se consigue nada con ello. En la mayoría de los casos el problema son los hábitos adquiridos que tenemos y que no son tan saludables como creemos. Por ello en este post vamos a detenernos en cinco de los más habituales que nos impiden perder esos kilos de más.
Seguro que cientos de veces nos hemos quejado de cómo puede ser posible que si comemos adecuadamente y practicamos deporte no logremos perder esos kilos de más que nos sobran. La verdad que a veces parece ilógico, pero todo tiene sus razones. Nosotros en esta ocasión nos queremos detener en algunos hábitos que hacemos sin pensar y repetimos día a día y que son los culpables de que no logremos perder esos kilos de más.
En primer lugar seguimos suspendiendo en el desayuno. Existen dos comportamientos, el primero es no desayunar nada y salir de casa con un café o cualquier infusión. En Vitónica siempre hemos defendido realizar un desayuno fuerte en el que las proteínas y los hidratos no deben faltar, así como las frutas. Desayunar es importantísimo porque es la primera comida del día y nos servirá para hacer que el metabolismo se active y aumentar las reservas de glucosa después de toda una noche sin ingerir alimento. Este simple gesto nos ayudará a regular el hambre que vamos a tener a lo largo del día y sin querer propiciaremos un mayor consumo calórico al activar el metabolismo.
Seguro que habitualmente somos cuidadosos con lo que comemos en las horas principales del día. El problema está entre las horas que separan esas comidas. Como siempre hemos dicho, es necesario que realicemos 5 comidas, esto incluye un almuerzo antes de la comida y una merienda antes de la cena. El problema está en que la mayoría de nosotros no nos planificamos estas comidas y nos llevamos a la boca cualquier cosa, como si eso no contase como comida. Es necesario que adquiramos un hábito en lo que se refiere al almuerzo y la merienda, debemos incluirlo en nuestra rutina alimentaria y es necesario elegir alimentos sanos. De este modo evitaremos la ingesta de alimentos calóricos que a la hora de la verdad nos frenan en nuestro propósito.
Las bebidas son otro punto en el que no reparamos nunca y que a la hora de la verdad tienen mucha importancia en la consecución de resultados. Bebidas como los refrescos azucarados, zumos envasados y con azúcares añadidos, bebidas alcohólicas… nos aportarán cantidades muy elevadas de azúcares refinados que ponen en juego nuestra línea. Por ello es necesario que seamos mucho más selectivos a la hora de elegir lo que bebemos. La mejor elección y la menos calórica es el agua, por supuesto.
El abuso de harinas refinadas es otro punto que debemos tener en cuenta y en lo que no reparamos. Es mucho mejor decantarnos por pastas, pan, arroces y demás hidratos de origen integral. Es necesario controlar las cantidades porque no podemos abusar, y cuando lo consumamos siempre debe ser integral. Los cereales integrales liberan hidratos complejos que el cuerpo asimila de manera lenta y de este modo evitamos la acumulación en forma de grasa. El truco está en que al liberarse poco a poco, nuestro organismo aprovechará esa glucosa para generar energía. Si se lo damos en pequeñas dosis y de modo contante conseguiremos aprovecharlo mejor.
Por supuesto un error que no se nos puede olvidar es la eliminación total de las grasas al hacer dieta. Es un error brutal, pues el cuerpo necesita grasas para funcionar correctamente y optimizar su uso por parte del organismo. Eso sí, las fuentes de ácidos grasos deben ser lo más saludables posible. Es necesario incluir en la dieta de pérdida de peso grasas insaturadas o polinsaturadas de fuentes como el pescado azul, el aguacate, el aceite de oliva, las olivas, los frutos secos… Hay que huir a toda costa de las grasas hidrogenadas, trans… Normalmente se encuentran en productos industriales y elaborados que es mejor desechar de la dieta.
Realmente se trata de sencillos pasos que debemos dar y tener en cuenta a la hora de conseguir el peso adecuado y por fin ver un resultado real y una respuesta a nuestros esfuerzos. No sirve de nada solamente cuidar las comidas principales si no tenemos en cuenta los pequeños detalles que pueden arruinarnos todo lo que estamos haciendo.
FUENTE: vitónica