Uno de los tipos de calzado más delicado y que más cuidados requiere es, sin duda alguna, el zapato de ante. Mientras que limpiar los de piel es algo relativamente sencillo, tal y como te explicamos en esta publicacion los de ante precisan de un proceso específico que, evidentemente, todo hombre debería conocer.

Lo primero que hay que tener en cuenta es la importancia de seguir estos pasos que os voy a explicar cada vez que nos pongamos unos zapatos de ante. Es mucho mejor guardarlos ya limpios y cuidados. Así prolongaremos su buen estado y, además, los encontraremos impecables la próxima vez que vayamos a cogerlos.

¿Cómo se limpian unos zapatos de ante?

Para empezar, hagamos un repaso de los materiales que necesitamos: spray protector de ante, cepillo para este tipo de piel, esponja, cuchilla, cepillo de uñas y goma de borrar. Una vez que tenemos nuestras herramientas, esto es lo que debemos hacer:

1. Con el cepillo de ante, quitamos el polvo y la tierra de los zapatos, cepillando siempre en la misma dirección.

2. Con ese mismo cepillo, tratamos de quitar los roces que hayan podido salir en el zapato. Si son muy profundos, podemos alisar la superficie con el filo de la cuchilla.

3. En caso de que haya manchas que no han salido, recurriremos a la goma de borrar. Veréis que es muy efectiva.

4. Una mancha difícil de quitar en el ante es la producida por líquidos. La mejor forma de quitarla es frotando con el cepillo de uñas, que habremos humedecido previamente. A continuación, utilizamos la esponja para quitar el exceso de agua y dejamos secar el zapato. Tras ello, cepillamos.

5. El paso final llega con la aplicación del spray protector de ante.

Y poco más. Con estos pasos, tus zapatos de ante permanecerán como nuevos. A continuación, tenéis un vídeo con todo el proceso y algún truco más para que no se deformen, como el uso de una horma o papel de periódico.