¿Tienes la piel seca? Un problema muy común que generalmente se trata de forma superficial a través de cremas. Sin embargo, muchas veces lo que necesitamos es una hidratación interior, sobre esto queremos hablar hoy, vamos a contarte cómo mantener tu piel hidratada y en buen estado a través de la alimentación, presta mucha atención!
Lo primero que vamos a recomendarte es lo más obvio, debes beber mucha agua, este líquido no solamente tiene la función de hidratarnos, también nos permite eliminar toxinas del organismo, lo recomendado es que bebas al menos dos litros de agua por día. También recomendamos los alimentos ricos en vitamina A, ya que estos ayudan a suavizarla y más importante, a prevenir las arrugas. Esta se encuentra en la yema de huevo, pescados azules y en alimentos de color verde oscuro, rojizo, amarillo y anaranjado.
Por otro lado, no olvides la vitamina C, para mantenerla sana y fresca, esta es muy importante para la formación de colágeno Se encuentra en hígado, lácteos, cítricos, pimientos y fresas. Junto con esta debes consumir la vitamina E, la cual ayuda a que la piel retenga sus hidratantes naturales y refuerce la defensa contra los rayos ultravioleta. Además, ayuda a cicatrizar las heridas y mantiene la piel en un buen estado de salud, protegiendo de los radicales libres. La puedes encontrar en aceite de germen de trigo, aceite de oliva, aceite de girasol, aceite de sésamo, frutos secos, semillas, frutas como el aguacate y mango, frutos desecados y vegetales, como las espinacas, acelgas, espárragos, berros, calabaza y brócoli.
El tomate es una mejores defensas para la piel ya que contiene un poderoso antioxidante llamado licopeno que además protege la piel del daño producido por los rayos solares. Contrariamente a lo que se cree, el antioxidante del tomate es mejor absorbido por el organismo una vez que este ha sido cocido.
El brócoli contiene componentes y que estimulan la producción de enzimas que protegen y mejoran la piel. Investigadores de la Universidad John Hopkins descubrieron que la piel tratada con un extracto de brócoli y expuesta a los rayos ultravioletas del sol tuvieron un 38 por ciento menos de enrojecimiento e hinchazón.
Esta comprobado que comer chocolate negro suaviza y mejora la apariencia de la piel. Según un estudio de la Universidad de Nottingham, el cacao que se utilice en el chocolate semi-amargo contiene sustancias que ayuda a contrarrestar el envejecimiento, la fatiga y los problemas de sueño.
En particular, el acido alfa-linolenico que se encuentra presente en los ácidos grasos omega 3, combate la sequedad de la piel, que a largo plazo promueve la formación de arrugas. Estos ácidos también se pueden encontrar, en las semillas de lino, el aceite de oliva y las almendras.
La grasa es un nutriente que protege todas las células del cuerpo, incluso las de la piel. Acorde con un reciente estudio de la Universidad Estatal de Pensilvania, si uno consume muy poca grasa, la piel se vuelve más frágil y débil. Y dentro de las grasas, que mejor que las que provienen de pescados como el salmón y la trucha que incluso estimulan la reparación de las células de la piel.
No es un secreto que el té verde es un poderoso antioxidante con propiedades anti-inflamatorias y efectos rejuvenecedores sobre la piel. Estos efectos son atribuidos sobre todo a su alta concentración de catequina. Investigaciones recientes han demostrado que dos tazas al dia de te verde mejora los problemas de enrojecimiento y daño en la piel producido por el sol.
Tanto la zanahoria, la naranja como el melón contienen una alta concentración de Vitamina A y carotenoides, que es un pigmento orgánico que se encuentra en varios vegetales y frutas y contribuye a darle a la piel un tono bronceado.
El avocado, aguacate o palta es una fruta cremosa y verde con abundante cantidad de aceites esenciales y vitamina B que actúan como nutrientes de tu piel, tanto desde adentro como desde afuera. La Vitamina B3 es especialmente importante para una piel saludable, ya que posee propiedades anti-inflamatorias, alivia la irritación y el enrojecimiento de la piel. Un aguacate tiene un 27% de la cantidad de Vitamina B3 que necesita el cuerpo.
El mango es una fruta que provee mas del 80 por ciento de lo requerimientos diarios de Vitamina A, la cual mantiene y repara las células de la piel. Un déficit de Vitamina A podría traducirse en una piel reseca y de aspecto escamado. La Vitamina A es un antioxidante que combate el daño de los radicales libres que puede causar un envejecimiento prematuro de la piel. Y como si esto fuera poco, un mango tiene solo 70 calorías por porción.
Las patatas asadas, no las fritas, con la cáscara incluída, contiene una gran cantidad de cobre a tal punto que una sola papa cubre el 75% de la necesidad de cobre del organismo. Este mineral tan importante funciona con la Vitamina C y el zinc para producir las fibras de elastina que sirve de soporte a la estructura constitutiva de la piel y le da elasticidad y brillo.
Los hongos son ricos en Vitamina B. Esta vitamina es vital para tu piel, ya que contribuye al mantenimiento del tejido y a su reparación. También mejora el enrojecimiento del tejido causado por la rosácea. Además, la Vitamina B es muy importante en la reparación de la piel en caso de heridas o quemaduras o después de una cicatriz.
Tanto los arándanos, como las fresas, las moras y las ciruelas están colmados de contenido antioxidante. En un estudio recientemente publicado por la Revista de Agricultura y Química Alimentaria, estas cuatro frutas contienen un mayor cantidad antioxidante que cualquier otro alimento, lo cual se traduce en múltiples beneficios para rejuvenecer y mejorar el aspecto de tu piel.
Si deseas que tu piel se vea libre de acné, puntos negros, hinchazón y arrugas, las nueces y en particular, su alto contenido de omega 3, puede ser tus aliadas. Los ácidos omega 3, que se encuentran en las nueces, ayudan a hidratar y suavizar la textura de la piel así como también protegen a la piel de químicos y otras toxinas.
El yogurt es un probiótico natural que ayuda a mejorar problemas gastrointestinales pero también mejora el aspecto de tu piel. Acorde con recientes investigaciones el yogurt es una excelente arma contra el acné, el eczema e incluso la caspa. Los mejores son los yogures bajos en grasas y azúcar, ya que el azúcar puede aumentar la inflamación de tu piel.
Los alimentos ricos en vitaminas A, B y C tienen antioxidantesque ayudan a reparar la piel; los alimentos ricos en betacaroteno, que son los vegetales de color verde oscuro, como las espinacas y frutas y hortalizas de color amarillo y naranja, como los pimientos amarillos y rojos, zanahorias, calabaza de color naranja y albaricoques son beneficiosos para restaurar las zonas dañadas de la piel.
Aquellos alimentos ricos en en vitamina B2, como el queso, la carne y los huevos ayudan a dar brillo a la piel. La vitamina A ayuda al crecimiento de piel nueva y se encuentra en el aceite de pescado, leche y huevos.
Los alimentos ricos en zinc ayudan a reparar los daños de la piel, como la descamación de la piel seca, picazón, y promueven la suavidad de la piel; buenos ejemplos son las ostras, sardinas, ostras, germen de trigo y semillas de calabaza.
El consumo de alimentos que contienen azufre pueden promover el rejuvenecimiento de la piel y mantener la piel hidratada, suave y flexible, como los espárragos, huevos, cebolla y ajo principalmente; aunque se encuentra en muchas frutas y verduras, leche y cereales integrales. Para aquellas personas que padezcan trastornos de la piel, son beneficiosos los baños de azufre.
Los ácidos grasos Omega-3 que se encuentran en el pescado de aguas frías pueden ayudar a que la piel sea menos sensible a los rayos ultravioleta, además el consumo de pescado, especialmente el salmón, y evitar las carnes rojas, son las formas de promover y mantener la salud de la piel, porque una dieta alta en grasas saturadas, puede causar envejecimiento de la piel.
El aceite de linaza prensado en frío sin refinar es también una fuente de omega-3, y se puede utilizar en ensaladas y verduras al horno a baja temperatura. Calentar los aceites promueve la producción de radicales libres que inciden directamente en la salud de la piel; por ello evita los aceites vegetales procesados por calor y los alimentos fritos.
FUENTE: buenasalud