La escasez de testosterona puede costarte la vida. Ya sabíamos de su relación con pérdidas de músculo, densidad ósea y apetito sexual, pero una investigación reciente muestra que además puede provocar mayor incidencia del cáncer de próstata, enfermedades coronarias e incluso muerte.

Sigue estos 5 pasos para aumentar tus recursos y alargar la vida.

DESCUBRE ABS

A medida que tu cintura aumenta, tu testosterona disminuye. De hecho, un aumento de 4 puntos en tu índice de masa corporal, aproximadamente 13 kilos de más en un hombre de 1’70 metros de altura , puede acelerar el comienzo de pérdida de testosterona en 10 años. Para tener las cosas claras a la hora de ponerte a dieta y así optimizar la pérdida de peso, échale un ojo a este artículo: 15 falsos mitos sobre tu dieta

CONSTRUYE BÍCEPS

Investigadores finlandeses han descubierto recientemente que los hombres que levantan pesas experimentan un incremento del 49% en sus niveles de testosterona libre. "A medida que fortaleces los músculos, aumenta la cantidad de testosterona que produce el cuerpo", asegura David Zava, director del estudio. Solo necesitas sudar la gota gorda y levantar pesas un par de veces por semana para notar el beneficio.

INCLUYE GRASA

Limitar el consumo de tostadas con mermelada y mantequilla puede ayudarte con la dieta, pero eliminar todo rastro de grasa desplomará los niveles de testosterona. Un estudio publicado en el International Journal of Sports Medicine revela que los hombres que consumen más grasa también tienen los niveles más altos de testosterona. Para proteger tu corazón y tu T, consume alimentos ricos en grasas monoinsaturadas como el pescado y las nueces.

ESCAPA DEL BAR

Las copas pueden causar estragos en tus hormonas. En un estudio holandés reciente, aquellos hombres que consumían cantidades moderadas de alcohol todos los días durante 3 semanas experimentaron una disminución del 7% en sus niveles de testosterona. Limita el consumo de alcohol a una o dos cañas o una copa de vino por la noche.

DETÉN EL ESTRÉS

El estrés mental o físico puede deprimir rápidamente tus niveles de testosterona. El estrés provoca la aparición del cortisol, que elimina la capacidad del cuerpo para producir testosterona. El cardio es un buen remedio. Sin excesos, claro. Ten siempre en cuenta que las lesiones y la fatiga son síntomas de que tu entrenamiento, en lugar de aumentar los niveles de T, los está disminuyendo.