Cuando las órbitas que dirigen la vida de dos personas se alinean de una manera jamás imaginada.
Dos importantes astrónomos, “Tycho Brahe” (Víctor Trujillo) y “Johannes Kepler” (Mauricio Isaac) realizaron un trabajo excepcional que sentó las bases para que Isaac Newton desarrollara la Ley de la Gravedad y cuya colaboración fue muy fructífera, tuvieron una relación complicada porque no siempre tenían el mismo punto de vista. Sus posturas científicas eras opuestas por lo que dudaban y desconfiaban mutuamente del trabajo que realizaba el otro.
Es así como inicia “La desobediencia de Marte” que en realidad es una pieza que muestra una obra de teatro dentro de la misma obra. Dos actores, uno joven de formación teatral universitaria y el otro, un actor ya mayor, cuyos últimos años se ha dedicado a realizar trabajos más comerciales en televisión que le han brindado reconocimiento del público. Sus posturas respecto a la actuación son opuestas y descalifican mutuamente el trabajo que realiza el otro.
Las conversaciones entre los dos actores que están ensayando la obra van de un tema a otro, la vejez, la juventud, las enfermedades, la maternidad, la paternidad o más bien, el padre ausente. Aderezados con humor, nuestros actores van desarrollando un vínculo profundo pues la tristeza y pesimismo por el que están pasando son consecuencia de los problemas del día a día. El texto contiene una amplia gama de emociones así como es la vida misma y fue escrito por Juan Villoro, una de las voces más destacadas de la literatura mexicana.
La obra se había montado anteriormente en 2017 y tanto en esa ocasión como ahora el director es Antonio Castro quien desarrolla un gran trabajo al matizar la corporalidad con frases cargadas de humor logrando un espectáculo muy disfrutable. La escenografía posee una simpleza que es justa y necesaria para complementar las palabras.
Víctor Trujillo desborda talento sobre el escenario. Cada palabra y cada movimientos están perfectamente bien hechos. Es notable cómo consigue que el público tenga empatía con un ser lleno de defectos pero que gracias a la actuación de Víctor lo proveé de alma. Mauricio Isaac inicia la obra dejándose llevar, quizás poniéndose al servicio del maestro, pero conforme transcurre la obra cobra una fuerza que lo coloca a la par. Y así como “Brahe” y “Kepler” tienen un debate sobre astronomía, Víctor y Mauricio tienen un duelo actoral donde el ganador es el espectador.
“La desobediencia de Marte”
Teatro Milán
Viernes: 20:45 hrs
Sábados: 18:15 hrs y 20:45 hrs
Domingos: 17:00 hrs
Director: Antonio Castro
Elenco: Víctor Trujillo y Mauricio Isaac
Autor: Juan Villoro
En Temporada: Hasta Diciembre 1o
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